Estas son las señales de que estás regando demasiado o muy poco a tus plantas

Las raíces de las plantas requieren de agua, nutrientes y oxígeno para sobrevivir y desarrollarse de una forma óptima, por lo cual, hay que tomar en cuenta estos factores al momento de tener una huerta o ser poseedor de un determinado vegetal. 

Cómo saber si estás regando demasiado o muy poco las plantas

Aunque existen muchas problemáticas que afectan de manera directa a las matas, en esta oportunidad puntualizaremos los aspectos que tienen que ver con el riego de las mismas.

En este punto, lo primero que necesitás saber es que, si el crecimiento de las plantas se detiene repentinamente y las hojas se vuelven amarillas o marrones, hay falta o exceso de riego. 

Con regularidad, es necesario que revises las hojas de las plantas, si están crujientes, están falta de riego; pero si por lo contrario están demasiado blandas al tacto, es muy probable que te hayas excedido con el riego.

No obstante, tendrás que estar pendiente a la caída de las hojas de las plantas, porque esta característica puede ser otro importante indicativo que destaca de manera directa el tema del riego.

Si notás que las hojas de las plantas se caen de manera prematura, las plantas tienen exceso de agua y deberás intentar revertir la situación lo antes posible.

Ahora bien, si los destaques anteriores no te fueron del todo útil, podés observar con cuidado las hojas, ya que en estas se generan ampollas cuando hay exceso de agua.

Por lo general, cuando las plantas no soportan el estrés y el exceso del agua, dan lugar a las ampollas que se despliegan de manera significativa en las hojas.

Como observación final, tendrás que tener mucho cuidado con el suelo de los vegetales. Si la humedad está 5cm por debajo de la superficie del suelo, significa que hay exceso del riego.

Si, por lo contrario, el suelo está tan seco que impide el ingreso de un destornillador en la tierra, a las plantas en cuestión les faltan agua y deberás regarlas de forma inmediata.