No tires los corchos de vino y aprovechalos para crear estas macetas para tus plantas de interior
Así podés transformar objetos en desuso en algo funcional para tu hogar.Si te gusta el reciclaje y tenés una gran cantidad de corchos a los que aún no le encontrás el uso, esta nota es para vos. Hacé vos mismo macetas para tus suculentas de una forma rápida, fácil y sin gastar dinero de más en recipientes que tienen una vida útil corta y contaminan el medio ambiente.
Estas macetas le van a dar un toque distinto a tu hogar, además de ser unas grandes aliadas para tus suculentas, ya que al ser de material de corcho permitirán eliminar los restos de agua, debido a su porosidad. Este es uno de los trucos que evitará que tu planta se pudra si la regás de más.
Son muy pocos los materiales que vas a utilizar para hacer estas macetas de suculentas y seguramente muchos de ellos los tenés en casa, así que no tendrás que salir a comprar. Vas a necesitar: corchos, maceta de plástico, silicona y pintura (opcional); si es que querés darle un toque personal y más colorido.
Paso a paso: cómo hacer macetas para suculentas
Para hacer estos recipientes para tus plantas con los corchos que tenés en desuso lo primero que debés hacer es calcular cuántos usarás. Por supuesto, será según la dimensión que tenga la maceta y que coincida con el tamaño que tu suculenta necesita. Tené en cuenta que deben ser corchos del mismo o similar largo y ancho.
Existen dos formas de hacer tu maceta con corchos, una de ellas es pegando con silicona cada uno de los corchos directamente en la superficie. No obstante, es importarte que cortes algunos, ya que las macetas suelen tener superficies irregulares y la idea es adaptarlos para que queden simétricamente correctos.
Otra manera de hacerlo es primero formando un cuadrado con los corchos. Luego, debés pegar dos corchos verticalmente con la silicona para que se forme una especie de pilares, que serán las esquinas de tu maceta. Más tarde, procedé a construir las paredes; podés usar tres corchos o más, según el tamaño que quieras: puede ser grande o más pequeña, según tu planta.
Lo mejor es primero pegar los corchos para crear el esqueleto de tu maceta (como un cubo) y después ir rellenando los huecos para hacer las paredes. Asimismo, tu maceta con corchos puede tener base, sin embargo, tendrás que cortar las curvas de los corchos para que pueda permanecer estática en un lugar.
Dejá secar el pegamento como mínimo dos horas y si querés pintala de un color a elección. Lo que sí tenés que asegurarte es que la pintura no sea tóxica para que no afecte a tus plantas. Finalmente, colocá tu suculenta en el interior de la maceta. ¡Un toque muy rústico y hermoso!