Crumble sin harina: una receta saludable y rápida para el desayuno o la merienda
Un versión distinta de un clásico que todos aman.El desayuno debe ser parte de tu rutina, pese a la vorágine del día. Darse un tiempo para disfrutar de esta comida es indispensable para arrancar. Muchos desayunan lo mismo a diario, otros son más creativos. Nosotros somos del segundo grupo, por eso traemos un crumble sin harina.
Esta receta de crumble sin harina busca eliminar uno de sus clásicos ingredientes para hacer un platillo más ameno y más liviano. Por eso, en la preparación, lo reemplazamos por maíz, que también aporta hidrato de carbono y otros nutrientes como proteínas, ácido fólico, grasas y más.
Ingredientes para 4 porciones
2 manzanas
75 g de harina de maíz de buena calidad
50 g de aceite de girasol
110 g de azúcar o el endulzante que uses
1 pizca de sal
20 g de copos de avena
40 g de pasas de uva
Ralladura de un limón a gusto
Vaina de vainilla o esencia de vainilla a gusto
Canela en polvo a gusto (opcional)
Modo de preparación
Lavá y secá una sola de las manzanas para rallarla por la trama gruesa del rallador. Luego, añadí unas gotas de limón para evitar que la manzana se oxide.
Hacé un corte longitudinal a la vaina de vainilla y sacá las semillas de su interior con cuidado. Calentá una sartén a fuego lento con dos cucharadas de azúcar.
Agregá una cucharada de aceite de girasol, una pizca de canela y las semillas de vainilla. Cuando el azúcar empiece a caramelizarse, agregá la manzana rallada y rehogá todo durante 4 o 5 minutos.
Pelá y troceá la manzana restante y añadila a la sartén junto con la ralladura de limón. Rehogá un par de minutos más, apagá el fuego y reservá.
Precalentá el horno a 180 °C. En un bol grande, mezclá la harina de maíz, la pizca de sal, el resto del aceite de girasol y los copos de avena o de maíz hasta conseguir una mezcla homogénea.
Colocá la manzana rehogada que reservaste antes en un recipiente apto para horno y repartí por encima la masa seca.
Para terminar el crumble sin harina, horneá unos 30 o 40 minutos a 180 °C, hasta que veas la superficie con un aspecto dorado.
Serví el crumble sin harina con crema chantilly, crema pastelera, mermeladas o con lo que más te guste.
Más sobre el crumble
El crumble original es un pastel con frutas. Se cocina con diversas frutas a elección que se recubren con una masa de harina, manteca y azúcar. Estos ingredientes secos son los que forman el arenado que se desmorona, de ahí el nombre en inglés.
Toda la preparación se lleva al horno, como vimos, y a la hora de presentarlo, se suele servir como postre caliente acompañado de natillas, crema chantilly, helado o compotas de diferentes frutas.