No tires tus sillas de pino viejas y flojas: reciclalas de esta manera y dales otra oportunidad

Muchas veces vemos que las sillas de pino suelen acabar en la calle, porque al aflojarse o "moverse", se cree que ya no sirven de nada, pero hoy queremos mostrarte que no hace falta.

Así como hay muchos que desisten de tener a este objeto en su hogar, otras personas optan por darle una segunda vida a las sillas de pino y vamos a demostrarte que se puede.

En esta nota de Minuto Argentina queremos que reutilices este noble recurso y puedas darle una segunda oportunidad a tus sillas de pino con un noble recurso como son los tarugos de madera.

Los materiales a utilizar son:

• Tarugo de madera del tamaño adecuado.
• Pegamento para madera.
• Martillo.
• Sierra (opcional, dependiendo del tamaño del tarugo).

Paso a paso:

1. Revisar el encastre de la silla para determinar la extensión del daño. Si es necesario, remover parte de la madera para hacer espacio al tarugo.
2. Si el encastre está muy agrandado, es posible que necesites cortar el tarugo de madera a medida, utilizando una sierra. Asegurate de que el diámetro del tarugo sea ligeramente mayor que el espacio disponible en el encastre.
3. Aplicar una cantidad generosa de pegamento para madera en el tarugo y en el interior del encastre de la silla.
4. Insertar el tarugo de madera en el encastre, asegurándote de que quede bien ajustado.
5. Si el tarugo no entra completamente con la presión de la mano, podes utilizar un martillo para golpear suavemente el tarugo hasta que esté completamente en su lugar.
6. Limpiar cualquier exceso de pegamento que haya salido del encastre con un paño húmedo.
7. Dejar que el pegamento se seque por completo y no utilizar la silla por unas horas, para asegurarnos que todo esté bien.
8. Si lo consideras necesario, podes añadir unos tornillos adicionales para reforzar la unión realizada, una vez que el pegamento se haya secado por completo.