El mayor temor de Lizy Tagliani en medio de su batalla judicial con Viviana Canosa
Los miedos de Lizy Tagliani.
El periodista Marcelo Polino, amigo cercano de Lizy Tagliani, reveló cuál es el mayor temor de la humorista en medio de su disputa judicial con Viviana Canosa. En una entrevista reciente, Polino explicó que, más allá del impacto mediático del conflicto, lo que más preocupa a Lizy es la posible afectación de su proceso de adopción, un trámite que lleva adelante junto a su pareja Sebastián Nebot.
La disputa entre ambas figuras comenzó cuando Viviana Canosa, en su programa de televisión, lanzó acusaciones contra Lizy Tagliani que la humorista consideró injuriosas y calumniosas. Ante la gravedad de las declaraciones, Tagliani decidió iniciar acciones legales contra la periodista, lo que derivó en una audiencia judicial en el Tribunal N.º 8 de Lomas de Zamora.
El pasado jueves 12 de junio, se llevó a cabo la primera audiencia conciliatoria entre ambas partes. Sin embargo, Canosa optó por no presentarse en persona, enviando en su lugar a su abogado Juan Manuel Dragani, quien participó de manera virtual.
Lizy, en cambio, asistió presencialmente, demostrando su compromiso con el proceso judicial. Según Marcelo Polino, lo que más preocupa a Lizy en lo privado no es el fallo judicial en sí, sino el impacto que este conflicto pueda tener en su trámite de adopción.
La humorista y su pareja obtuvieron la guarda definitiva de un niño en agosto del año pasado, pero aún esperan la resolución legal de la adopción plena. "Todo el grupo quiere justicia, pero en el caso particular de Lizy, hay un aditivo muy importante: está en juego la adopción de su hijo. Ese es el punto que a ella la tiene más preocupada en lo privado", explicó Polino.
El periodista detalló que la Justicia es extremadamente rigurosa en los procesos de adopción y que cualquier causa judicial activa puede convertirse en un obstáculo insalvable. "Hasta que esta causa no caiga, ningún juez firma una adopción plena si hay uno de los papás involucrado en una situación con la Justicia", advirtió.
El impacto mediático
Además del temor por la adopción, Lizy también enfrenta el impacto mediático del conflicto. Según Polino, la humorista está preocupada por la repercusión pública de la disputa y por cómo esto podría afectar su imagen.
"Tiene miedo de que se cuestione su credibilidad y la forma en que siempre manejó su carrera con respeto y honestidad", expresó el periodista. A pesar de la angustia que atraviesa, Lizy ha dejado en claro que no dará marcha atrás en su reclamo judicial. En declaraciones recientes, afirmó que su objetivo es limpiar su nombre y que no permitirá que las acusaciones de Canosa queden impunes.
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