Hogar

Los trucos que tenés que conocer para lavar tus manteles y que queden como nuevos

No pierdas tiempo con otras opciones y seguí estos sencillos consejos.
lunes, 12 de junio de 2023 · 02:00

¿Estás cansado de tener los manteles manchados después de cada comida con tu familia o amigos? ¿Has probado múltiples detergentes y técnicas de lavado, pero siguen sucios y sin brillo? No te preocupes, ¡te tenemos cubierto! En este artículo, compartiremos algunos secretos sobre cómo lavar los manteles y dejarlos como nuevos.

Mantené la higiene de tus manteles.

Elige el jabón y la temperatura del agua adecuados

Usa un jabón suave que no contenga lavandina ni suavizantes, ya que estos productos químicos debilitan las fibras y causan decoloración. Para manteles de color, utiliza uno diseñado para ese tipo de tejidos y así evitar la decoloración. Lavalos con agua fría o templada, ya que caliente encoge y fija las manchas. Si tienen marcas difíciles, tratalos previamente con un quitamanchas. Seguí las instrucciones de la etiqueta para obtener los mejores resultados.

Clasifica tus manteles por material

Algunos están hechos de algodón, poliéster o lino, que requieren técnicas de lavado diferentes. La regla general es clasificarlos por materiales. Los manteles de algodón pueden lavarse en la lavadora con un jabón suave. Los de poliéster, en cambio, es mejor lavarlos en agua fría y colgarlos para que se sequen y no encojan. Los de lino requieren un lavado y secado suaves. Evita utilizar suavizantes, ya que rompen las fibras.

No los guardes húmedos ni manchados.

No sobrecargues la lavadora

Demasiados manteles en una carga daña las fibras y reduce la eficacia del lavado. En su lugar, lavalos en cantidades más pequeñas, siguiendo las instrucciones de la etiqueta. Para obtener mejores resultados, lavalos por separado de otras prendas.

Seca bien los manteles

Evita secarlos a la luz directa del sol, ya que los destiñe. En su lugar, utiliza un tendedero o un tendedero en una zona sombreada. Si utilizas una secadora, ponela a fuego lento o seca al aire para prevenir que se encojan. Sacalos de la secadora cuando aún estén ligeramente húmedos y colgalos para que se sequen por completo.

Tu casa lucirá más elegante con manteles limpios.

Plancha los manteles

Cuando aún estén ligeramente húmedos, a una temperatura de baja a media. Esto ayudará a eliminar arrugas y pliegues, y dará un acabado impecable. Una vez planchado, dobla bien el mantel y guárdalo en un lugar seco y fresco hasta que vayas a volver a utilizarlo.