AMAZONÍA

En septiembre se registraron casi 17 mil incendios en la Amazonía

Es la cantidad más baja de siniestros en la Amazonía de los últimos 20 años.
viernes, 1 de octubre de 2021 · 17:04

La Amazonía en Brasil registró 16.742 focos de incendio en septiembre de este año, el mejor dato desde 2001, cuando se notificaron 15.528, de acuerdo a datos proporcionados por el Gobierno. Las quemas se redujeron a casi la mitad frente al mismo mes de 2020, cuando hubo 32.017 siniestros.

El Instituto Nacional de Pesquisas Especiales (INPE) reveló que el dato es inferior a la media histórica de septiembre para la Amazonía, que en 1998 tuvo 32.778 focos de calor. La selva tropical más grande del planeta ocupa el 60% del territorio brasileño.

El descenso en el número de incendios fue gracias a las precipitaciones registradas en la región durante el periodo, especialmente en la última semana de septiembre. A diferencia de 2019 y 2020, los incendios en la Amazonia se redujeron; pero, se mantiene en cifras elevadas.

Aunque los incendios bajaron, la cifra sigue siendo alta.

 

Las denuncias internacionales

Greenpeace denunció que los incendios surgieron de forma ilegal, ya que se incumplió un decreto publicado el 29 de junio para suspender por cuatro meses el uso de fuego en las propiedades rurales de la zona. “La Amazonia sigue bajo una intensa amenaza, la ilegalidad y destrucción continúan devastando grandes áreas”, señaló la organización a través de un comunicado.

La época seca habría beneficiado a la selva brasileña en relación a los incendios, pero la deforestación sigue al alza. Las imágenes satelitales del INPE denotan la deforestación y se habrían destruido 6.779 kilómetros cuadrados de cobertura vegetal entre el 1 de enero y el 24 de septiembre de 2021.

El año pasado, la tala de árboles en el ecosistema amazónico alcanzó su mayor nivel de los últimos 12 años, según el INPE. La sociedad civil atribuye el aumento de la destrucción del bioma al discurso antiecologista del presidente Jair Bolsonaro.

El mandatario brasileño defiende la explotación de recursos minerales dentro de las reservas indígenas y recortó el presupuesto de los órganos oficiales que persiguen los delitos medioambientales.