Suecia: esta ciudad rodeada de bosque es uno de los paraísos ecológicos más importantes del mundo

La ciudad de Skellefteå, en Suecia, es un ejemplo de cuidado al medio ambiente, su aeropuerto es de madera, al igual que la mayoría de sus escuelas, puentes y hasta tiene uno de los edificios ecológicos más altos del mundo.

Skellefteå está ubicada en el extremo norte de Suecia y rodeada por 480 mil hectáreas de bosque de pinos y abetos. Al ingresar a esta ciudad del país escandinavo es sorprendente cómo los residentes aprendieron a priorizar la madera entre los materiales de construcción, para conservar no solo un estilo rústico, sino para tomar conciencia sobre el clima.

En esta parte de Suecia se construye la fábrica de baterías para vehículos eléctricos más grande de Europa y no solo las producirá, también las reciclará. Los helicópteros eléctricos están por ser una realidad y los aviones, a un mediano plazo.

En Skellefteå se utiliza energía 100% renovable, a través de la generación eólica e hidroeléctrica; cada año se reciclan más de 120 mil toneladas de desechos electrónicos y el exceso de calor de este proceso se devuelve a la población a través del sistema de calefacción que funciona en todo el territorio.

El Sara Cultural Center y el Wood Hotel son una muestra de lo que se puede hacer con madera y almacenan más de 9 mil toneladas del carbono de la atmósfera en el proceso.

La tecnología utilizada en las construcciones

Detrás de las sorprendentes construcciones en esta ciudad de Suecia hay materiales simples, los principales son madera laminada encolada o glulam y madera laminada cruzada o CLT. La primera está hecha por camas de madera unidas entre sí, tiene capacidad de carga mayor que el acero y el hormigón; mientras que la segunda es de gran tamaño y fuerte en todas las direcciones, es perfecta para paredes y losas de piso.

Las edificaciones de madera tienen un efecto positivo en los trabajadores de la construcción, según explican los especialistas, porque mientras un lugar en construcción es ruidoso y tóxico, una edificación de madera tiene una apariencia de serenidad.