Brasil
Guardianes del Amazonas: los indígenas utilizan drones para defender sus tierras
En Brasil, los pueblos originarios del Amazonas deben enfrentar la apropiación de los territorios, tala de árboles y quemas.
La administración del presidente Jair Bolsonaro en Brasil ha sido polémica, no solo por el manejo de la pandemia del coronavirus y sus desafortunadas declaraciones, sino también por el poco interés por cuidar los territorios y a las comunidades que viven en el Amazonas.
En la selva viven miles de indígenas, que en los últimos años han enfrentado duras agresiones. Según el informe anual del Consejo Indígena Misionero, en 2020 se registraron más de 300 agresiones físicas en el Amazonas y al menos 182 personas fueron asesinadas.
Desde el año pasado, se conformaron grupos indígenas que son conocidos como los guardianes del Amazonas que dedican al menos ocho horas de su día a supervisar zonas utilizando drones proporcionados por el WWF (Fondo Mundial para la Naturaleza, en español).
La asociación Kanindé organizó los cursos para los pueblos a los originarios y ayudó a designar 15 indígenas para realizar mediciones, evaluar imágenes, captar y vigilar la extensión desde el aire.
La FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación, en español) demostró que los residentes del Amazonas no reciben ayuda estatal y trabajan con sus propios medios para proteger la zona y garantizar seguridad a sus familias.
Cuánto perdió la Amazonia el último año
El INPE (Instituto Nacional de Pesquisas Espaciales) de Brasil, sostiene que las quemas y las talas de árboles en el boque ya causaron la perdida de 754 millones de árboles, solo en el último año. Estos datos fueron presentados en la cumbre climática COP26.
Solo entre agosto de 2020 y julio de 2021 fueron deforestado 13.235 kilómetros cuadrados de la región amazónica, según el INPE y casi mil millones de árboles fueron dañados.
La superficie de floresta amazónica derribada hasta julio de 2021 fue de 21.9%, superior a la devastación entre agosto de 2019 y julio del año pasado.
Pese a la situación, el presidente Jair Bolsonaro dijo que las noticias que alertan sobre la destrucción irreversible del Amazonas son un fastidio y negó la existencia de deforestación ilegal.
