La campaña de vacunación de Brasil se tambalea: el Gobierno pidió ayuda a China

El Ministerio de Salud de Brasil pidió ayuda a la Embajada de China en el país con el objetivo de que haga de intermediaria con el laboratorio chino Sinopharm. El Gobierno del presidente Jair Bolsonaro sostiene que la campaña de vacunación es la principal vía para frenar el avance de la pandemia pero, por la falta de dosis, el plan corre el riesgo de frenarse.

“La campaña nacional de vacunación corre el riesgo de ser interrumpida por la falta de dosis dada la escasez de oferta internacional”, explicaron las autoridades sanitarias de Brasil en el documento enviado a la legación china. “Por ello, el Ministerio de Salud está buscando establecer contacto con nuevos proveedores, en especial con los del laboratorio Sinopharm, cuya vacuna es de comprobada eficacia", indicó el documento firmado por el viceministro de Salud, el coronel Elcio Franco. 

El Gobierno brasileño pretende adquirir 30 millones de dosis del fármaco de Sinopharm durante este primer semestre para reforzar la campaña. La solicitud llega después de que Brasilia y Pekín tuvieran roces en sus relaciones a causa del diputado e hijo del presidente, Eduardo Bolsonaro. El año pasado, el político había acusado a la “dictadura” china de “esconder” información sobre el origen del virus, en línea con el discurso del entonces presidente estadounidense, Donald Trump. En consecuencia, el embajador chino en el país protestó.

Fuente: (EFE)

El país vecino recibió, hasta el momento, millones de dosis del laboratorio británico AstraZeneca y del chino Sinovac. Además, el Gobierno está en negociaciones con la farmacéutica Pfizer. Pero el tiempo apremia. La variante brasileña del coronavirus, detectada por primera vez en el Amazonas, ya se encuentra en la mayor parte del país. Se cree que esta mutación es la principal causante de la aceleración de los contagios y decesos en Brasil. En las últimas 24 horas, el país de unos 200 millones de habitantes registró 1.954 muertes a causa de la enfermedad y más de 70 mil casos positivos. Con muchos hospitales en estado crítico y cientos de personas esperando por una cama, Brasil se encuentra en su peor momento.