Brasil

Crisis sanitaria en Brasil: por el desborde del sistema funerario, hacen entierros de noche

Las personas sepultadas alcanzaron ayer un nuevo récord en San Pablo.
jueves, 1 de abril de 2021 · 08:31

El estado de San Pablo es el actual epicentro de la pandemia en Brasil. Según el último reporte de las autoridades sanitarias, durante la jornada de ayer se registraron más de 23 mil casos positivos y 1.160 fallecidos. La crisis sanitaria y hospitalaria que vive San Pablo derivó en una crisis más: la del sistema funerario. Tanto es así que los trabajadores de los cementerios de la capital paulista deben realizar entierros nocturnos.

El mapa muestra al estado de San Pablo como el epicentro de contagios (izquierda) y fallecidos (derecha) en el país.

El pasado martes 30, San Pablo, la capital estatal homónima, batió el récord de entierros diarios al ser sepultadas 419 personas en un solo día. La trágica situación que vive el estado más rico de Brasil resulta evidente si se menciona que durante este mes de marzo (hasta el 30) fueron enterradas 9.350 personas, mientras que el pico de entierros en este estado el año pasado fue mayo con 8.638, según datos proporcionados por O Globo.

Con el aumento de fallecimientos la intendencia de la ciudad más rica del país vecino habilitó que cuatro cementerios puedan funcionar en horas de la noche para poder agilizar el proceso. Ayudados con generadores y reflectores, los sepultureros no descansan. 

Entierro nocturno en San Pablo.

Otra imagen ilustra aún más la grave situación que atraviesan los paulistas en particular pero que alcanza a todos los brasileños. El Servicio Funerario de San Pablo, que contaba con 45 vehículos, tuvo que ampliar su flota y contratar 50 vehículos (combis) más. Así, combis que eran utilizadas como transporte escolar pasarán a ser usadas para transportar cuerpos.

Fuente: (Imagen Noticias)

Bolsonaro criticó las medidas para contener la pandemia

A diferencia de su ministro de Salud, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, criticó ayer las medidas de distanciamiento y aislamiento recomendadas para contener los contagios y aliviar el sistema sanitario. “Quedándonos en casa no vamos a solucionar ese problema", aseguró el mandatario. El jefe de Estado siempre fue muy crítico de las medidas de confinamiento al asegurar que la vida y el trabajo estaban en el mismo nivel de importancia. “Brasil tiene que volver a trabajar. La población tiene que volver a trabajar", afirmó y agregó: "Los efectos colaterales de la pandemia no pueden ser más que los del propio virus".

El líder ultraderechista no se pronunció, además, sobre evitar aglomeraciones innecesarias. Al contrario, su nuevo ministro de Salud, Marcelo Queiroga, insistió ayer a sus conciudadanos en que se queden dentro de sus hogares durante Semana Santa. El pedido del funcionario tuvo lugar cuando Brasil cerró su mes más mortífero en lo que va de la pandemia y en medio de un colapso sanitario que provocó que 17 estados y Brasilia tengan una ocupación de más del 90% de camas de terapia intensiva.