Nueza Zelanda

Lágrimas y alegría: las emotivas imágenes del primer vuelo burbuja entre Australia y Nueva Zelanda

Los habitantes de los países oceánicos tienen fuertes lazos entre sí.
lunes, 19 de abril de 2021 · 12:42

Escenas de película se vivieron hoy en los aeropuertos de Sídney, Australia, y Auckland, Nueva Zelanda. Padres se reencontraron con sus hijos e hijas, abuelas conocieron a nietos y amigos pudieron abrazarse de nuevo. Es que hoy, por primera vez en un año, se abrieron vuelos comerciales entre ambos países cuyos pasajeros no deberán hacer cuarentena al llegar a su destino: los llamados vuelos burbuja

Reencuentro en el aeropuerto de Auckland.

“Cuando vi Auckland desde el aire comencé a llorar”, comentó una pasajera a The Guardian, después de abrazar a su mejor amiga en el aeropuerto de la ciudad más importante de Nueva Zelanda. Esta escena se repetía por doquier. La emoción de una madre solo le permitió decir: “Es tan bueno tenerla de vuelta”, al recibir a su hija a la que no veía desde el 2019.  

Instantáneas del primer vuelo burbuja.

Entre tanta tristeza y devastación que todavía produce la pandemia en gran parte del mundo, estos dos países oceánicos pueden gozar de un momento de suma felicidad debido a su exitosa lucha contra el coronavirus. Se espera que hoy 10 mil pasajeros hagan el recorrido entre ambas islas en 30 vuelos. 

 

La situación sanitaria de Australia y Nueva Zelanda

Australia, país dirigido por el primer ministro Scott Morrison, acumula desde el inicio de la pandemia unos 29.500 contagios de coronavirus. De ese total, 910 personas fallecieron. El país cerró sus fronteras rápidamente cuando el virus comenzó a golpear al mundo. Desde entonces, hay unos 30 mil australianos que todavía no pudieron volver a casa. Sin embargo, Morrison aseguró esta semana que no tiene ningún apuro en abrir las fronteras para vuelos comerciales. 

La segunda ola de la pandemia fue la más cruel en Australia.

Por su parte, el país dirigido por la primera ministra laborista Jacinda Ardern, fue globalmente elogiado por su gestión de la pandemia. Hasta el momento, en Nueva Zelanda, un país insular de unos 5 millones de habitantes, solo 2.596 personas dieron positivo al virus, de las cuales solo 26 murieron. Tanto el temprano cierre de fronteras, como el cierre de las ciudades donde se detectaron brotes y el seguimiento de los contactos estrechos fueron claves para el control del virus. Sin embargo, los países vecinos son los que más lentamente avanzan en su campaña de vacunación entre los países desarrollados.

La gestión de Nueva Zelanda fue tomada incontablemente como ejemplo a seguir.