Egipto

Para explicar misterios del Antiguo Egipto, le hicieron una tomografía computarizada a una momia

El estudio fue realizado por un grupo de científicos italianos que pretende revelar milenarios secretos funerarios.
miércoles, 23 de junio de 2021 · 20:55

La momia de Ankhekhonsu, un antiguo sacerdote egipcio, fue sometida a un estudio de tomografía computarizada que los especialistas esperan que ayude a esclarecer detalles acerca de las costumbres funerarias del Antiguo Egipto. El proceso estuvo a cargo de un grupo de científicos italianos que forma parte del denominado Proyecto de Investigación de Momias.

El estudio se hizo en el hospital Policlínico de Milán.

Sabina Malgora, la directora de la investigación, destacó la importancia que tiene el estudio de las momias, uno de los principales tesoros históricos que caracteriza al país de los faraones. “Las momias son prácticamente un museo biológico, son como una cápsula del tiempo”, señaló la especialista.

En el mismo sentido, explicó que, a partir de los resultados de la tomografía, esperan reconstruir datos sobre la vida y muerte de este sacerdote egipcio, como también reconocer las técnicas y procesos que se utilizaron para momificar su cuerpo. Según indicó Malgora, más allá del aporte histórico para conocer mejor la vida en el Antiguo Egipto, las revelaciones de la investigación podrían ser de utilidad para el desarrollo de tratamientos vinculados a la medicina actual.

“Estudiar enfermedades y heridas antiguas es importante para la investigación médica moderna; podemos estudiar el cáncer o las arteriosclerosis del pasado y esto puede ser útil para la investigación moderna”, apuntó.

Actualmente, la momia se encuentra en el Museo Arqueológico Cívico de Bérgamo, en Italia.

 

El sacerdote de Khonsu, el dios de la Luna

La momia de Ankhekhonsu fue hallada en un sarcófago fechado entre los años 900 y 800 antes de Cristo. El nombre de este sacerdote significa “'el dios Khonsu está vivo” y estaba escrito cinco veces en el sarcófago que contenía su momia.

Khonsu, la deidad a quien rendía culto este sacerdote, era considerado el dios de la Luna en el Antiguo Egipto. Tebas fue su principal centro de adoración. Su nombre se menciona en los textos de las pirámides y de los sarcófagos, donde es representado de una manera bastante feroz.