México

Un argentino crea una nueva “iglesia maradoniana” en México, donde nació la mano de Dios

Diego Maradona tenía un gran recuerdo de ese país, donde ganó el Mundial 1986.
viernes, 16 de julio de 2021 · 08:50

¿Quién le puede discutir a sus fanáticos y fieles que Diego Maradona no hace milagros? Sin duda, Marcelo Buchet, un argentino que vive en México hace más de veinte años, así lo cree.

Por eso, pensó en la manera de homenajear al ídolo argentino y se inspiró en la iglesia maradoniana que se ubica en Rosario. Qué mejor que abrir un nuevo templo en la tierra que lo vio hacer sus mejores milagros hace 35 años.

Marcelo Buchet fue el ideólogo de la nueva iglesia maradoniana en Puebla.

Su idea comenzó con un simple impulso propio para tener siempre presente a Maradona y colocó una imagen del astro del fútbol con el típico sombrero mexicano. A su alrededor, colocó fotografías y camisetas de los clubes en los que jugó y, por su puesto, el número 10 de la celeste y blanca.

De esta manera, en la ciudad prehispánica de Cholula, Puebla, desde ahora habrá una nueva sede del culto al mejor jugador de la historia. Por su parte, su creador, citado por la agencia de noticias Sputnik, sostuvo que Maradona les “dio una identidad como argentinos”.

Los fieles se rinden de rodillas antes de entrar al templo.

Asimismo, el templo se localiza al pie de la pirámide descubierta a principios del siglo XX, uno de los atractivos de la ciudad que, ahora, tiene un nuevo museo del futbol para visitar por los residentes y turistas.

 

México, la tierra prometida

En México, en el Mundial de 1986, su mundial, hizo la jugada de todos los tiempos que fue votada como el mejor gol de la historia. Además, en ese mismo Argentina 2 - Inglaterra 1, en el Estadio Azteca, nació “la mano de Dios”.

Maradona dirigió en México al Dorados de Sinaloa, por lo que en sus últimos momentos volvió a estar presente en el país latinoamericano.

Pero eso no fue todo, tras eliminar a Uruguay, Inglaterra y Bélgica, llegó la final con Alemania y los argentinos y las argentinas acariciaron la gloria junto esa imagen final: Maradona y la copa en sus manos.

Finalmente, tantas personas le han pedido a Diego infinitos milagros a lo largo de su vida que, quizás, este templo tendrá otro fin: agradecerle por todo lo que hizo y significó para Argentina y el mundo.