SUECIA

Insólito hallazgo en Suecia: descubrieron una nueva especie de escarabajos en heces fosilizadas

El insecto se mantuvo oculto durante más de 200 millones de años y su cuerpo está intacto.
sábado, 3 de julio de 2021 · 18:57

Un equipo de investigadores de la Universidad de Uppsala, en Suecia, descubrió una especie de escarabajos nunca antes vista. El ejemplar data de hace más de 200 millones de años y se mantuvo intacto gracias a que se encontraba entre las heces fosilizadas de un dinosaurio, conocidas también como coprolitos.

Uno de los aspectos que más llamó la atención de los científicos del país europeo fue el excelente estado de conservación del escarabajo, que preservaba sus patas y antenas. Luego de realizar una microtomografía, los especialistas llegaron a la conclusión de que se trataba de una especie nunca antes vista.

Decidieron bautizarla como Triamyxa coprolithica, en alusión al Triásico. Según explicaron, el insecto de 1,5 milímetros de longitud, probablemente vivía en ambientes semiacuáticos y húmedos.

El escarabajo representa un único ejemplar de una especie extinta. Fuente: (Current Biology).

 

Escarabajos y dinosaurios

El fragmento de estiércol fosilizado, que posibilitó el descubrimiento a los científicos de Suecia, pertenecía a un ancestro de los dinosaurios, cuyo nombre es Silesaurus opolensis. Vivió durante el período Triásico, hace unos 227 millones de años, en el territorio que actualmente pertenece a Polonia.  

Se considera que este animal se alimentaba de insectos del suelo, como el escarabajo recientemente descubierto. Sin embargo, también ingería otras especies más grandes, cuyos rastros también fueron identificados en el estudio.

A modo de broma, el director de la investigación aseguró: “Este dinosaurio hizo un poco de trabajo de campo por nosotros”. Y aseguró que se trata de un hallazgo que él y su equipo no podrían haber realizado sin la colaboración del antiguo animal.

Finalmente, los protagonistas del descubrimiento opinaron que la información revelada podría contribuir en la sistematización de conocimientos acerca de la evolución temprana de los insectos, iniciada hace más de 100 millones de años.