REINO UNIDO

Oportunidad perdida: un matrimonio del Reino Unido se hizo millonario de golpe y ahora está en la ruina

Ganaron la lotería, pero lejos de cumplir sus sueños, solo se llenaron de problemas y decepciones.
lunes, 5 de julio de 2021 · 20:25

Una pareja del Reino Unido es protagonista de una increíble historia. Hace casi diez años, ganaron en la lotería un premio de 148 millones de libras esterlinas, que actualmente equivalen a unos 205 millones de dólares. Con esa fortuna, apostaron a cumplir sus sueños, pero una década después, se encuentran en la ruina.

Adrian y Gillian Bayford ganaron el dinero en agosto de 2012. Luego de acceder al premio, festejaron junto a sus hijos, viajaron al exterior del país europeo, compraron autos de lujo y hasta buscaron en qué invertir la gran fortuna que adquirieron por azar. Pero a un año de convertirse en ganadores, los brindis con champagne se terminaron.

En 2013, el matrimonio anunció su separación en medio de comentarios sobre supuestas infidelidades. Luego del divorcio, cada uno encontró nueva pareja y pudo rehacer su vida. Pero en el ámbito económico, ninguno de los dos tuvo demasiada suerte.

Adrian y Gillian tienen dos hijos en común. 

 

Negocios frustrados

Gillian cambió de trabajo y se dedicó a emprender en algunos negocios en los que no le fue demasiado bien. Posteriormente, se ganó una condena por agresiones a una de sus parejas y se casó con un hombre acusado de estafas.

Adrian tampoco tuvo mucha suerte. En 2017 se comprometió con una mujer aficionada a los caballos y se inclinó a trabajar en ese ámbito. Al poco tiempo, ella lo dejó y escapó no solo con los valiosos caballos, sino que también se llevó un auto de alta gama y hasta las mascotas que tenían en común.

Actualmente, ambos tienen deudas y una serie de problemas económicos que no logran resolver. 

 

La última esperanza de Adrian

Lo único que le quedó a Adrian Bayford es una mansión en el Reino Unido, que está valuada en 9 millones de dólares. La propiedad está deshabitada hace dos años y se encuentra muy deteriorada por la falta de mantenimiento.

Hasta ahora, todos sus esfuerzos por venderla han fracasado e incluso le generaron más gastos. Debido a que los espacios como la piscina y el gimnasio empezaron a ser utilizados por algunos ocupantes, tuvo que contratar a un equipo de seguridad privada para que cuide su propiedad.