Los bomberos de Jerusalén combaten un gran incendio forestal que ha desplazado a miles de personas

Los incendios forestales que azotan Jerusalén envían grandes columnas de humo sobre la ciudad mientras los bomberos utilizan aviones y cambiones en tierra para luchar contra las poderosas llamas que obligaron a evacuar de varias comunidades pequeñas.

Fuentes afirman que el fuego silvestre ha arrasado más de 4.200 acres de terreno boscoso, territorio cuatro veces mayor que el afectado por los incendios del 2020, y ha dejado cerca de 3.100 residentes desplazados en la capital de Israel.

El servicio de ambulancia nacional israelí Magen David Adom no ha reportado heridos graves y agregaron que parecía ser poco probable que los incendios, a unos 10 kilómetros al oeste de Jerusalén, llegaran a la ciudad y afectaran más personas.

Por su parte, el portavoz del Departamento de Bomberos, Dedi Simchi, aseguró que “el incendio fue 100 % causado por personas” y dijo que se investigará si su inicio fue “deliberado o por accidente”. “Primero apagaremos el fuego y mañana comenzaremos con la investigación”, agregó.

El comisionado de bomberos y rescate de Jerusalén dijo que hasta ahora “se han desplegado 12 aviones de extinción de incendios junto con tripulaciones de unos 60 camiones de bomberos”.

“Me complace decir que logramos evitar que comunidades enteras fueran quemadas”, indicó Simchi en una sesión informativa para el ministro de Seguridad Interna de Israel.

Los servicios de emergencia de Jerusalén precisaron que unas cuatro aldeas fueron evacuadas. En la sesión informativa, Simchi dijo que ya no enfrentaban ningún “peligro crítico”, aunque “hay algunos focos, donde se han incendiado viviendas que aún son extinguidas”.

Finalmente, el líder del Departamento de Bomberos adelantó que las tripulaciones “permanecerían desplegadas durante toda la noche y posiblemente durante los próximos días para evitar que el fuego se propague, en medio de altas temperaturas y fuertes vientos”.

Ya no hay nada: el drama de los vecinos de Jerusalén

Mientras los bomberos contienen la expansión de las llamas en el incendio forestal que afecta las cercanías de Jerusalén, los vecinos de estas zonas viven desgarradores momentos al presenciar la destrucción de sus campos, bosques y casas.

“Todo es negro, ya no hay nada verde”, dijo al medio digital Walla un vecino de Shoeva, situado en los contornos de la capital política de Israel. “Es desgarrador”, añadió el testigo.

Se sabe que dos personas desaparecieron como resultado de los incendios. En las últimas horas se informó la aparición de uno de ellos.