INDONESIA

El ADN de un fósil podría ser la clave en el descubrimiento de una antigua cultura humana

Los restos hallados pertenecen a una raza extinta de hombres de la Edad de Piedra.
lunes, 30 de agosto de 2021 · 09:26

El ADN de los huesos fosilizados de una adolescente que vivió hace aproximadamente siete mil años, que fueron hallados en 2015 en Indonesia, podrían ser la clave de una “cultura antigua y misteriosa” nunca antes registrada por los arqueólogos.

Los primeros estudios hechos al cráneo de una mujer, que parece haber tenido 18 años al momento de fallecer, demostraron que este se remontaba a la Edad de Piedra y las muestras de material genético sugirieron que compartía vínculos ancestrales con los habitantes de Nueva Guinea y los aborígenes de Australia.

Sin embargo, análisis más profundos de ADN permitieron determinar que la adolescente pertenecía a una especie extinta de humanos antiguos llamados “toaleanos”, de los cuales hasta ahora no se tenía ningún registro.

“Hemos descubierto el primer ADN humano antiguo en la región insular entre Asia y Australia, conocida como Wallacea, lo que nos proporciona una nueva visión de la diversidad genética y la historia de la población de los primeros humanos modernos en esta parte del mundo poco conocida”, dijo el coautor del estudio Adam Brumm, profesor de arqueología en el Centro de Investigación de la Universidad de Griffith para la Evolución Humana.

El clima cálido tropical de la zona es capaz de descomponer por completo los restos biológicos, por lo que el hallazgo resultó sorprendente.

El estudio apunta a que los primeros humanos modernos utilizaron las islas Wallacea cuando viajaron desde Eurasia hasta Australia hace más de 50 mil años. No obstante, la ruta exacta a través de la cual se realizaban las travesías aún no se ha determinado.

“Para hacerlo, debieron utilizar algún tipo de embarcación relativamente sofisticada, ya que no había puentes terrestres entre las islas, ni siquiera durante los picos glaciares de la última Edad de Hielo, cuando el nivel global del mar era hasta 140 metros más bajo que el actual”, explicó Brumm.

"Hasta ahora, se pensaba que la primera vez que personas con genes asiáticos entraron en Wallacea fue hace unos 3.500 años, cuando los agricultores de habla austronesia procedentes del neolítico de Taiwán atravesaron las Filipinas y llegaron a Indonesia”, dijo Brumm.

El estudio intuye que Wallacea podría haber sido una región en la que los diversas especies de humanos se mezclaron y se reprodujeron.

 

¿Quiénes eran los toaleanos?

La evidencia arqueológica sobre los toaleanos, grupo humano al que se cree que pertenecía la joven hallada en 2015, es aún bastante escasa. Los primeros estudios sugieren que este pueblo vivía en Célebes (una isla de Indonesia) cuando la adolescente aún vivía, ya que junto a sus restos fueron encontradas herramientas asociadas a esta población antigua.

“El código genético de la mujer reveló un gran parentesco con los aborígenes australianos y neoguineanos actuales, lo que quiere decir que su estirpe se separó antes que cualquiera de esos grupos se alejara el uno del otro hace unos 37 mil años”, señaló Selina Carlhoff, coautora del estudio y miembro del Instituto Max Planck para la Ciencia de la Historia Humana.

En el lugar del hallazgo, también se encontraron piedras que eran utilizadas como adornos y herramientas.

Las primeras teorías sostienen que la joven vivió durante un movimiento migratorio rumbo a Australia y Nueva Guinea, lo que habría sucedo hace 50 mil y 60 mil años. Además, en el genoma del fósil se encontró ADN de denisovanos, otra subespecie de humanos ancestrales que vivió hace cerca de 100 mil años.

Los arqueólogos no saben a ciencia cierta qué sucedió con la cultura toaleana, y este descubrimiento genético resulta una pieza fundamental para la teoría que intenta comprender la antigua historia de los humanos en el sudeste asiático. Los expertos confían en que se puedan recuperar más datos de ADN antiguo del pueblo toaleano para revelar su diversidad “y su historia ancestral” de forma “más amplia”.