ESPAÑA

El volcán Cumbre Vieja arrasó con más de 300 edificios y avanza lentamente al mar

La emisión de gases tóxicos podría agudizarse cuando el magma llegue al océano.
viernes, 24 de septiembre de 2021 · 12:10

El volcán Cumbre Vieja ya ha arrasado con 320 edificaciones en la isla de La Palma, en el archipiélago de Canarias, y su actividad magmática podría prolongarse por unos meses más.

Desde su erupción hasta la fecha, la formación geológica ha consumido más de 154 hectáreas y se dirige progresivamente al mar, donde podría desatar explosiones, aumentar la emisión de gases capaces de contaminar el aire y de generar una lluvia ácida en la región.

El Instituto Volcánico de Canarias (Involcan) estima que el volcán Cumbre Vieja podría extender su actividad “entre 24 y 84 días más”, aunque la media podría ser de 55 días, de acuerdo con sus características geológicas.

El Gobierno de España ha comprado a sus propietarios las primeras 71 casas destruidas por el volcán.

A raíz del incidente, el Gobierno de Canarias y el de España declararon la zona como “catastrófica”, debido a que “afectó rutas, colegios y hospitales, así como los servicios de agua, luz y telecomunicaciones”.

Aunque al comienzo la colada volcánica avanzaba hacia el mar a una velocidad de 700 metros por hora, en los últimos días la lava ralentizó su ritmo a 4 metros por hora, lo que permitió que algunos vecinos de las zonas de riesgo pudieran volver a sus hogares para extraer algunas pertenencias.

Se espera que el rey Felipe VI y la reina Letizia visiten La Palma el próximo sábado 25 de septiembre. Allí, visitarán el puesto de mando que dirige las labores de emergencia y conversarán con los habitantes evacuados.

Geólogos y vulcanólogos especialistas estudian de cerca el fenómeno terrestre. 

 

Las autoridades temen que la colada magmática llegue al mar

Explosiones, olas de agua hirviendo y nubes tóxicas son algunas de las consecuencias naturales que podría desatar la llegada del magma del volcán Cumbre Vieja al océano Atlántico.

Estas consecuencias se suman a la emisión de entre seis mil y once mil toneladas de dióxido de azufre (SO2) que la formación geológica emite diariamente a la atmósfera producto de su actividad.

Los expertos aseguran que los mayores peligros para los humanos pueden ser la irritación de las mucosas nasales y los ojos, la inflamación de los pulmones, entre otras afecciones respiratorias y epidérmicas, por lo que piden a la población nativa y turistas mantenerse alejados del lugar.