El Salvador aprobó la reelección presidencial y expertos denuncian que atenta contra la democracia

El Salvador vive momentos de tensión política después de que la Corte Suprema de Justicia avalara la posibilidad de reelección presidencial, impedida por la Constitución de ese país, lo que permitiría al presidente Nayib Bukele postularse nuevamente para un tercer mandato consecutivo.

El fallo del máximo tribunal judicial, dirigido al Tribunal Supremo Electoral (TSE), habilita al líder de la nación centroamericana a postularse a una nueva reelección, si así lo considera conveniente, mientras que el texto constitucional anterior lo impedía en pro de la alternabilidad.

“Con lo que pasó se han quebrantado gran parte de los artículos de la Constitución, entre ellos el 88, que señala que “la alternabilidad en el ejercicio de la presidencia es indispensable para el mantenimiento de la forma de gobierno y sistemas políticos establecidos”, señaló el director de la Fundación de Estudios para la Aplicación del Derecho (Fespad), Saul Baños.

En caso de que este principio constitucional sea quebrantado, la Constitución de El Salvador “obliga” a la sociedad a “la insurrección”, agregó el experto.

El texto constitucional, ahora reinterpretado, exigía a los individuos que quería repostularse a la presidencia esperar un plazo de dos periodos para poder volver a postularse al máximo cargo Ejecutivo de la nación.

Tras el anuncio, el TSE de El Salvador dijo que “dará cumplimiento” a la resolución de la Corte, ya que estas resultan “inapelables y obligatorias”, por lo que aceptaría la “inscripción” del presidente Bukele si este “así lo desea”.

Salvadoreños protestan contra la reelección de Bukele

Cientos de ciudadanos tomaron las principales calles de El Salvador el domingo en rechazo al fallo constitucional de la Corte Suprema de Justicia que habilitó al presidente Bukele a competir por un nuevo mandato en 2024.

“Manifestamos nuestro rechazo absoluto a los recientes actos arbitrarios y autoritarios del régimen de Nayib Bukele”, señalaron algunos manifestantes congregados en el Monumento a la Constitución.

Los opositores afirmaron que estas acciones “atentan contra la democracia y la disidencia con el fin de consolidar un poder Ejecutivo absoluto”.