AUSTRALIA
Australia abrirá sus fronteras: podrán ingresar solo los vacunados contra el coronavirus
Quienes no hayan recibido el fármaco tendrán que hacer cuarentena y solicitar un permiso especial.El primer ministro de Australia, Scott Morrison, anunció la reapertura de fronteras tras casi dos años de cierre a causa de la pandemia del coronavirus. Los turistas extranjeros podrán ingresar siempre y cuando hayan completado su esquema de vacunación contra la enfermedad.
Los ingresos al país oceánico serán autorizados a partir del 21 de febrero, cuando las autoridades esperan relajar las acciones derivadas de la pandemia. Australia es una de las naciones más estrictas en cuanto a cuidados y exigencias para los turistas.

Australia reforzó nuevamente sus medidas en diciembre del año pasado, debido a la circulación de la variante Ómicron que afectó principalmente a las residencias de ancianos y causó infinidad de ausencias laborales, por el repunte de contagios.
Esta nación acumula 2.4 millones de infecciones de coronavirus y murieron a causa de la enfermedad 4.250 personas. Se estima que, en este momento, unas 300 mil personas cursan la enfermedad y menos del 10% están hospitalizadas.

Scott Morrison explicó que los turistas que quieran visitar el país deben cumplir una sola regla. “La condición es que tienes que tener dos dosis de la vacuna para venir a Australia. Esta es la regla y se espera que todos la obedezcan”, añadió el titular del Gobierno.
Han sido casi dos años desde que decidimos cerrar las fronteras de Australia.

Qué pasará con los no vacunados
Las personas que no están vacunadas y quieran ingresar al territorio australiano tendrán que solicitar un permiso especial de viaje y someterse a cuarentena en un centro elegido por las autoridades y destinado exclusivamente a esos fines.
La apertura fue impulsada por el Gobierno central; sin embargo, el estado de Australia Occidental, quedará al margen de la decisión hasta que sus autoridades lo consideren oportuno. Las reglas derivadas de la pandemia golpearon a la industria turística y, por ende, a los pequeños negocios.
Australia cerró sus fronteras en marzo de 2020 y, desde entonces, redujo progresivamente las acciones a fin de transitar un regreso progresivo a la normalidad que se conocía antes de la llegada del coronavirus.