EL SALVADOR
El presidente de El Salvador asegura que Joe Biden apoya a las pandillas
El país centroamericano lleva dos semanas con estado de excepción por el asedio de los grupos criminales.
El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, parece distanciarse cada vez más de la administración de Estados Unidos, dirigida por Joe Biden. En las últimas horas responsabilizó a su homólogo norteamericano de apoyar a las pandillas, que tanto dolor causan en su territorio.
El jefe de Estado de la nación centroamericana cuestionó a través de Twitter a Ned Priece, vocero del Departamento de Estado de Estados Unidos, y aseguró que hablan mientras no apoyan a El Salvador en su lucha contra la criminalidad.
Desde hace varios años, las pandillas controlan varias zonas vulnerables en El Salvador, generan temor, extorsionan y asesinan a decenas de personas. La problemática se profundizó en los últimos años debido a pactos irregulares entre los gobiernos y los cabecillas de estos grupos.
Las críticas a Estados Unidos
En repetidas ocasiones, las autoridades estadounidenses se han pronunciado por el estado de excepción decretado en el país del Triángulo Norte hace dos semanas. Pidieron al presidente Bukele que no se vulneraran los derechos humanos y se defendieran las libertades civiles.
Estados Unidos también se mostró en contra de los ataques a la libertad de prensa, que se vuelven cada vez más evidentes. Especialmente porque Buekele publica nombres de comunicadores que evidencian las transgresiones que cometen las fuerzas de seguridad.
Los señalamientos del presidente de El Salvador no sorprenden, ya que cada vez es mayor la distancia marcada con su homólogo Joe Biden. El mandatario defendió su relación con el titular anterior, Donald Trump.
Obtuvimos apoyo del gobierno de Estados Unidos para combatir el crimen, pero bajo la administración de Trump. Ahora ustedes están apoyando a las pandillas.
El régimen de excepción se mantendrá por dos semanas más en El Salvador y hasta el momento han sido detenidas más de 9 mil personas. Entre los capturados hay personas que no son pandilleros y salían de trabajar al momento de su detención, según algunos casos que se publicaron en medios locales.
