RUSIA
Daño colateral: unos 150 mil trabajadores en Rusia han sido despedidos desde que comenzó la guerra
Otro grupo de empleados fue obligado a tomar vacaciones forzadas debido al cierre temporal de empresas.
La población en Rusia también sufre los efectos de la guerra impulsada por Vladímir Putin en Ucrania. El Ministerio de Empleo y Protección Social informó que unos 50 mil trabajadores perdieron su empleo y otros 98 mil fueron forzados a tomarse unas vacaciones.
Las sanciones que diferentes países del mundo impusieron a Rusia, llevaron a la retirada de empresas internacionales que condenan las acciones en contra de Ucrania. El alcalde de Moscú, capital de la nación euroasiática, Serguéi Sobianin, aseguró que al menos 200 mil personas están por perder sus puestos de trabajo.
La inactividad de las compañías crece cada vez más, de acuerdo a los datos presentados por el viceministro de Empleo de Rusia, Andréi Pudoy, quien lamentó el cese de labores para un gran número de personas, aunque aclaró que no se considera una crisis de despidos masivos.
El alcalde de Moscú confirmó que más de 300 compañías internacionales cesaron sus actividades y esto cambió significativamente el comercio en la ciudad. Pese al cese de miles de trabajadores, las autoridades aseguran que hubo 2.5 millones de contratos.
Hoy, unos 670 mil ciudadanos están registrados en los centros de empleo, mientras que hay 1.9 millones de puestos de trabajo en el banco de datos vacantes.
A finales de marzo se hizo una estimación sobe los rubros más afectados por el cierre de compañías extranjeros y se estimaba que 70 mil informáticos, asustados por el cambio en el clima empresarial y político, abandonaron Rusia desde que Vladímir Putin ordenó la invasión a su país vecino.
La crisis generada por la guerra
Las autoridades del país bicontinental insisten en que la retirada de empresas no ha afectado en gran manera a la economía; sin embargo, cuando comenzó la invasión, la población comenzó a retirar su dinero de los bancos.
La moneda rusa, el rublo, también tuvo una fuerte caída con el anunció de guerra y las empresas de tarjetas de crédito anunciaron su retirada del mercado.
