PARAGUAY
Los funcionarios de Paraguay piden medidas de seguridad tras el asesinato del fiscal Marcelo Pecci
El crimen ha conmocionado al país y las investigaciones continúan en Colombia.
Los magistrados de la Corte Suprema de Justicia de Paraguay solicitaron a las autoridades que se redoble la protección para todos los funcionarios judiciales que tienen bajo su responsabilidad investigaciones relacionadas con el crimen organizado.
El magistrado Eugenio Jiménez Rolón explicó que lo que necesitan los funcionarios en Paraguay es una mayor cobertura policial por la cantidad de casos importantes que procesan. El país sudamericano sigue conmocionado por el asesinato del fiscal Marcelo Pecci, que fue ultimado en Colombia mientras disfrutaba de su luna de miel.
Pecci se especializó en delitos contra el crimen organizado y estuvo a cargo de investigaciones de gran importancia para Paraguay. Su esposa sostiene que nunca recibió amenazas, pero las autoridades investigan un supuesto seguimiento mientras se dirigía a la iglesia el día de su matrimonio.
Ante esta situación, la magistrada Carolina Llanes lamentó que el crimen se haya convertido en una advertencia para el resto de funcionarios y pidió que se tome con responsabilidad y prioridad. “La seguridad debe rodearlos para que puedan cumplir con efectividad sus funciones”, resaltó.
Al respecto, el director de la Policía Nacional, Gilberto Fleitas, dijo que la seguridad física de las autoridades que tienen a su cargo causas emblemáticas será prioridad. Añadió que el 8% de casi 9 mil efectivos policiales serán destinados al resguardo de instituciones públicas y sus autoridades.
El último adiós a Marcelo Pecci
Este domingo, los paraguayos dieron su último adiós a Marcelo Pecci y sus restos fueron inhumados en el cementerio de La Recoleta, ubicado en Asunción. Fue una ceremonia privada en la que estuvo rodeado de sus seres queridos.
El funcionario tenía 45 años de edad y se había convertido en uno de los funcionarios más prestigiosos del territorio paraguayo. Su muerte tuvo lugar luego de ser atacado a tiros en una playa privada de la isla de Barú, frente a las costas de Cartagena de Indias.
