Asesinato de Marcelo Pecci: uno de los capturados detalló cómo se planeó el crimen

Cinco personas fueron detenidas por el asesinato del fiscal paraguayo Marcelo Pecci, quien fue ultimado mientras disfrutaba de su luna de miel con su esposa, en Colombia. Cuatro de las capturados se declararon culpables y uno dice ser totalmente inocente.

Los detenidos por el crimen del funcionario paraguayo son acusados de homicidio agravado, fabricación, tráfico y porte de armas de fuego. Según el Ministerio Público, el venezolano Wender Scott Carillo habría sido quien disparó el arma y Francisco Luis Correa Galeano se encargó de la logística y la financiación del asesinato de Marcelo Pecci; sin embargo, es el único que insistió en su inocencia.

Las cinco personas fueron capturadas en Medellín al noreste del país y se refugiaban en dos viviendas. Las autoridades colombianas ofrecían hasta 500 mil dólares como recompensa por información sobre los implicados en la muerte de Marcelo Pecci.

El presidente de Colombia, Iván Duque, fue quien informó sobre la operación conjunta con las autoridades paraguayas y organismos de inteligencia norteamericanos. “Hemos capturado a todos los presuntos involucrados, incluyendo al autor material del asesinato”, dijo en su momento.

Según los investigadores, el crimen tendría relación con las investigaciones en las que trabajaba el empleado judicial en contra del terrorismo internacional. La audiencia de los detenidos se hizo bajo reserva debido a que tanto el juez como los involucrados en el proceso recibieron amenazas.

Quién ordenó el crimen sigue prófugo

Los capturados serán trasladados a Bogotá a fin de garantizar su seguridad pues muchos de ellos temen por su vida. “La orden de asesinar a Pecci se hizo desde Paraguay y hay un grupo de narcotraficantes muy fuerte con nexos con un cártel de Brasil, el Comando Capital, que estaría reclutando gente del Tren de Aragua”, explicó uno de los investigadores del caso.

Uno de los detenidos dijo que quienes ordenaron el crimen eran tan poderosos que podrían llegar al juez o al fiscal del caso en Colombia. Los sicarios fueron contratados y recibirían el equivalente a 50 mil dólares cada uno, pero estos no recibieron la totalidad del dinero.