PANAMÁ

Crisis social en Panamá: el Ejecutivo busca poner fin a las protestas que llevan más de dos semanas

El Gobierno ya congeló el precio de los combustibles, pero la medida parece ser insuficiente para la población.
domingo, 17 de julio de 2022 · 10:39

En Panamá el Gobierno no logra contener las protestas derivadas de la inconformidad de la población por el alza de precios derivada de la inflación que afecta a diferentes países del mundo y que ha minado el bolsillo de todas las familias.

Varias organizaciones populares en el país centroamericano llevan dos semanas en las calles, en rechazo al alto costo de la vida y también para denunciar presuntos actos de corrupción en la administración de Laurentino Cortizo. Esta situación toma por sorpresa a los residentes de Panamá que no están acostumbrados al clima de inestabilidad que se vive actualmente.

Trabajadores de diferentes rubros salieron a expresar su inconformidad con el Ejecutivo.

Durante la última semana, hubo importantes cierres de carretera. Se espera que esta semana por comenzar una delegación del gobierno y representantes de los manifestantes se reúna en una escuela de Santiago Veraguas, a 250 kilómetros al sureste de la Ciudad de Panamá.

Se espera que tras el encuentro, se anuncie una nueva baja en el precio de las gasolinas, en los alimentos y también las medicinas. También exigen que se tomen acciones contra la corrupción y el mal uso de recursos por parte del Ejecutivo.

La población exige medidas económicas inmediatas.

En el territorio panameño hay 4.2 millones de residentes que experimentan una de las mayores crisis sociales desde 1989, cuando cayó la dictadura militar del general Manuel Antonio Noruega, justo después de la invasión de Estados Unidos.

 

Las medidas de emergencia

Hace unos días, el Gobierno bajó y congeló el precio de la gasolina que pasó de 5,17 dólares a 3,95 por galón. Varios alimentos también experimentaron una reducción considerable, pero insuficiente para la mayoría de organizaciones que protestan en las calles.

Las protestas cumplieron dos semanas y derivaron en varios cierres de carreteras principales.

El descontento de los panameños se debe a una inflación interanual del 4.2% registrada en mayo, un aumento del combustible del 47% y la tasa de desempleo que está arriba del 10%.