PAKISTÁN
Crisis humanitaria en Pakistán: inundaciones dejan más de 1.200 muertos y millones de damnificados
Las autoridades han declarado zona de catástrofe a más de la mitad de los distritos del país.Se agrava la crisis humanitaria en Pakistán, donde las intensas lluvias monzónicas de los últimos tres meses han provocado las mayores inundaciones en más de una década.
Actualmente, más de la mitad del territorio de Pakistán se encuentra amenazado por las fuertes lluvias y las inundaciones que, hasta la fecha, se han cobrado la vida de más de 1.200 personas y han dejado a más de 33 millones de paquistaníes sin hogar. Buena parte de la República Islámica se ha declarado en estado de emergencia máxima.
Fuente: (Euronews)
Al menos 80 distritos del norte, sur y centro este de Pakistán han sido declarados zona de catástrofe por los masivos daños que dejan las inundaciones. Según las estimaciones del Gobierno, las lluvias torrenciales que han azotado al país desde junio ya dejan más de 10.000 millones de dólares en daños.
Esta situación ha obligado al Gobierno de Pakistán a solicitar un apoyo “serio y sincero” por parte de la comunidad internacional, que a finales de agosto se había comprometido a ayudar al país a superar esta terrible situación.
“Es muy difícil lo que estamos viviendo en nuestro país. La magnitud del desastre no tiene precedentes y existe el riesgo de que la población sufra de hambruna por la falta de alimentos”, alertó el primer ministro de Pakistán, Shehbaz Sharif, al precisar que “la ayuda internacional ha llegado a cuentagotas”.
La ONU envía ayuda a Pakistán
El sábado pasado, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) envió un cargamento humanitario al país con más de 60 toneladas de comida para socorrer a la empobrecida población paquistaní, que sufre los efectos de la peor temporada monzónica en toda su historia.
Sin embargo, la FAO y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) han alertado a la comunidad internacional sobre el grave riesgo que suponen estas inundaciones para la región de Asia del Sur, dado que hay una altísima posibilidad de que se propaguen enfermedades infecciosas relacionadas al agua, como lo son la cólera y el dengue.