Los incendios no ceden en el Delta del Paraná y el humo se propaga por Rosario

Pese a las reiteradas denuncias de las autoridades y los graves daños ambientales, los incendios en el Delta del Paraná no ceden, por lo que los brigadistas trabajan de manera incansable por tratar de contener las llamas.

Debido a las fuertes conflagraciones en las islas, la ciudad de Rosario permanece llena de humo, lo que afecta la salud de sus pobladores. Lo más preocupante, es que los incendios en el Delta del Paraná son provocados por la quema de pastizales.

De acuerdo con el último reporte de las autoridades, el principal foco ígneo en el Delta del Paraná se encuentra frente a la localidad santafesina de Pueblo Esther, en cercanías a Rosario.

Debido al humo, en la zona se presenta poca visibilidad, por lo que las autoridades de Seguridad Vial le piden a los conductores conducir con precaución para evitar accidentes en calles y autopistas.

Entre tanto, desde el Observatorio Ambiental de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) explicaron que, ante el avance del humo, las consultas de los pobladores por problemas respiratorios se incrementaron en los últimos días.

Por ello, las autoridades sanitarias recomiendan no realizar actividades al aire libre y usar barbijo, mientras se logra disipar la nube de humo que volvió a contaminar el aire de la región, donde viven más de un millón de personas.

Además de la ciudad de Rosario, las localidades del sur de Santa Fe y el norte de Buenos Aires como Villa Gobernador Gálvez, Pueblo Esther, Villa Constitución y San Nicolás, también se han visto afectadas por los altos niveles de contaminación. Desde el Servicio Nacional de Manejo del Fuego informaron que operan en la zona un avión hidrante, un helicóptero con helibalde y un helicóptero para traslado de personal perteneciente al Ministerio de Defensa.

Durante los primeros días de septiembre se quemaron más de 28 mil hectáreas

De acuerdo con el reporte de las autoridades, solo en la semana entre el 5 y el 11 de septiembre se detectaron unos 893 focos de calor en las islas; mientras en lo que va corrido del año se han detectado 16.500 focos.

La cifra supera el registro histórico de incendios generados en 2012 por quemas, pues hasta el momento se han quemado alrededor de 165.000 hectáreas, a lo que hay que sumarle unas 28.000 hectáreas más que se consumieron durante los primeros 13 días de septiembre.