A 37 años del estreno de "Volver al Futuro": curiosidades detrás del película

Considerada una obra maestra sobre los viajes en el tiempo, “Volver al Futuro” es uno de los éxitos cinematográficos más grandes de todos los tiempos. La película de ciencia ficción se estrenó un día como hoy de 1985 y, a pesar del tiempo, aún suma fanáticos.

El film dirigido por Robert Zemeckis y producido por Steven Spielberg logró una identidad propia que le permitió convertirse en una película de culto. Desde el DMC DeLorean del profesor Emmett Brown al “¿acaso eres gallina?”, “Volver al Futuro” logró tener un sello propio que la distingue por completo.
 

Protagonizada por Michael Fox, quien se pone en la piel de Marty McFly, y Christopher Lloyd, quien encarna al “Doc” Emmett Brown, “Volver al Futuro” relata las aventuras de un adolescente que, a través de los viajes en el tiempo, altera los sucesos de su línea temporal. En esta oportunidad, exploraremos algunos detalles detrás de la exitosa película.
 

Curiosidades detrás de “Volver al Futuro”

Aunque en el primer año de lanzamiento el film logró ser el más visto del año y de inmediato cosechó fanáticos en todo el mundo, el guion de la película fue rechazado más de 40 veces. La que hoy es considerada una pieza maestra del cine tardó cuatro años en encontrar una persona dispuesta a filmarla.

Si bien de inmediato el público identifica a Michael J. Fox como la figura de “Volver al Futuro”, el actor estuvo cerca de no protagonizar el éxito de ciencia ficción. A pesar de ser la principal opción de Zemeckis, el actor se encontraba en pleno rodaje de la sitcom “Family Ties”.

Ante ello, surgió Eric Stoltz como alternativa. El intérprete se compenetró por completo en la historia, ya que trasladó a su personaje detrás de cámaras y aprendió a patinar y tocar la guitarra (tal como lo hacía Marty McFly). Sin embargo, su estilo no logró satisfacer por completo al equipo. Por ello, ni bien estuvo disponible Fox, Stoltz fue sustituido.

Con el reemplazo de Stoltz, la película no solo tuvo el tiempo en contra, sino que también perdió grandes cantidades de dinero. Ante ello, los guionistas tuvieron que amoldarse a las nuevas exigencias y cambiar sobre la marcha lo establecido.

En este contexto, abandonaron la idea original, donde la máquina del tiempo del Doc adquiría la energía necesaria tras una explosión nuclear. Con ello, se inclinaron por la caída de un rayo sobre el reloj del juzgado de Hill Valley, modificación que resultó un acierto absoluto y que, con el tiempo, se convirtió en una de las escenas emblemáticas de la obra.