Lujos
Edificio de última generación y paredes de cristal: la mansión de Roger Federer en Zúrich
El jugador de tenis adquirió una millonaria propiedad con características únicas.
Roger Federer es uno de los tenistas más reconocidos a nivel mundial, por lo que cuenta con varias excentricidades propias de quienes no tienen problemas económicos. Una de sus adquisiciones más relevantes fue realizada en el 2014, por la que tuvo que pagar unos 7 millones de euros aproximadamente.
En aquel entonces, el galardonado tenista se hizo acreedor de una casa con una particularidad que no pasó desapercibida por nadie. Dicho hogar es de cristal y podría tranquilamente pertenecer a la realeza. Ubicada en Wollerau, Suiza, la propiedad suma dos departamentos para huéspedes.
La mansión de Federer tiene tres pisos, con una cúpula de cristal. Por otro lado, el acceso al paisaje del lago de Zúrich es constante, ya que íntegramente está hecha del material de la cúpula y cuenta con ventanas hasta en los techos. Además, la vivienda tiene un gimnasio privado, un spa, pileta y una cochera subterránea.
Cabe destacar que la casa se encuentra dentro de un edificio de última generación, elegido también por los pilotos multimillonarios de F1, Felipe Massa y Kimi Raikkonen.
Los lujos no tienen fin
Como era de esperarse, Roger es propietario de otras viviendas en distintas locaciones, lo cual no resulta descabellado dado que fue nombrado por Forbes como el deportista mejor pago en el 2020. Durante ese año, sus ganancias subieron a los 106,3 millones de dólares.
El jugador tiene una casa en Dubái valuada en 15 millones de euros y tachada por sus propios fanáticos como el lugar que menos lo representa estéticamente, por el tipo de decoración en madera y colores neutros elegidos. Se sabe que ese es el refugio al que escapa en lo meses fríos de Suiza y así no sufrir las bajas temperaturas.
Para finalizar, está la propiedad de Lenzerheide, que se insiste que está construida sobre suelos sumamente contaminados y, por su ubicación, bloquea el acceso a lago Zúrich, lo que es fuertemente criticado.
