Estos son los hábitos que generan el temido "efecto rebote"

Si quieres mejorar tus hábitos, es mejor que tomes la decisión y comiences, pero con la información correcta para que lo hagas de forma saludable. Muchas personas quieren bajar porcentaje de grasa o aumentar músculo, pero muchas veces sucede que, al no ser constantes y abandonar el buen hábito, aparece lo que muchos creen que existe: el "efecto rebote".

Quiero despejar tus dudas: no existe tal "efecto rebote". Lo que sucede es que, cuando una persona deja de comer comida chatarra, se aleja de los excesos de alcohol o cigarrillo, de calorías y grasas en los platos, comienza a hacer actividad física, se suplementa y toma agua, comienza a mejorar a todo nivel. Sin embargo, si dejas de hacer todo lo que le hace bien a tu organismo y retomas tus malos hábitos del pasado, tu cuerpo aumentará la grasa y perderá músculo.

Ahora toma nota de lo que voy a contarte. Hábito número 1: "Tentaciones". Lo ideal es que puedas hacer un equilibrio entre todos tus alimentos, pero sobre todo las porciones y cantidades. Trata de que el 80% de tu día tu organismo reciba alimentos saludables. En tanto que, durante ese 20%, date los gustos para que no sea difícil llevar ese proceso.

Hábito 2: "Evitas las escaleras y usas ascensor". Cuando inicias un proceso de pérdida de grasa, es ideal que puedas comenzar también con un rato al día de actividad física. En tu edificio puedes optar por caminar por las escaleras, antes de ir por lo fácil que es el elevador. A medida que el cuerpo esté en movimiento, se favorecerá tu sistema arterial y cardiovascular. 

Hábito 3: "Comer en exceso". Es muy importante llevar una guía de comidas y recetas que te permitan controlar los platos. A veces, por ejemplo, solemos colocar en el plato una porción de arroz o fideos muy grande, pero poca verdura o proteína. Es importante que consultes a un profesional en el tema que pueda guiarte. 

Hábito 4: "Decirle adiós al gimnasio". Es esencial que, a medida que trabajes para bajar el porcentaje de grasa corporal, lo complementes con la actividad física que puedas hacer. Eso traerá muchos beneficios a tu salud y, sobre todo, acelerará el metabolismo, quemarás más grasita corporal y tendrás más energía.