AstraZeneca: la OMS aseguró que no hay razones para suspender su uso

La Organización Mundial de la Salud (OMS) salió hoy a respaldar la vacuna contra el coronavirus desarrollada por el laboratorio británico AstraZeneca y la Universidad de Oxford. El apoyo al fármaco llega después de que varios países de Europa y Tailandia suspendieran su aplicación mientras se investigan casos de trombosis en personas que se inyectaron este inmunizante. Hasta ahora, no obstante, no se halló una relación entre ambos.

En conferencia de prensa, una vocera de la OMS respondió a la pregunta sobre si debería continuar aplicándose el producto. “Sí, deberíamos continuar utilizando la vacuna de AstraZeneca”, afirmó Margaret Harris y continuó: “No hay razón para no utilizarla”. La portavoz del organismo internacional aclaró que se estaba estudiando la información sobre los coágulos sanguíneos detectados, pero que hasta ahora no se había observado ninguna relación causal con la vacuna. 

"Siempre tenemos que asegurarnos de mirar todas las alertas de seguridad cuando distribuimos las vacunas y tenemos que revisarlas, pero no hay ninguna indicación para no usarla", agregó Harris. Las declaraciones oficiales de la OMS se suman a las de la propia farmacéutica, que ayer insistió en que su producto es seguro y eficaz, y que esto está comprobado por los datos surgidos en los estudios en fase 3. 

Alemania y Australia también se sumaron hoy a la defensa de la vacuna del laboratorio británico. El ministro de Salud alemán, Jens Spahn, indicó: “Todo lo que sabemos hasta el momento sugiere que los beneficios de la vacuna, aun ante todos los casos individuales reportados, son mayores que los riesgos”. El primer ministro australiano, por su parte, también llevó tranquilidad a la población de su país. Allí también la campaña de vacunación contra el coronavirus está protagonizada por este fármaco.

Fuente: (EFE)

Ayer, Dinamarca, Islandia, Noruega e Italia, y hoy Tailandia y Bulgaria suspendieron preventivamente la aplicación de esta vacuna después de que en territorio danés se detectaran "casos graves de coágulos en personas vacunadas". Antes, Austria también había dejado de inyectar a la población con un lote particular de estos fármacos cuando una enfermera de 49 años que fue inoculada con esta vacuna falleció por “graves trastornos de coagulación".