España: qué hay detrás de la oleada migratoria en Ceuta

El Gobierno de España está atónito: nunca vio venir la repentina y masiva oleada migratoria en Ceuta. Las autoridades españolas se cuidaron mucho de no criticar a sus pares marroquíes ni a su policía fronteriza por permitir que 6 mil personas cruzaran irregularmente la frontera. Sin embargo, no son pocos quienes afirman que fue adrede y que detrás hay una crisis diplomática.

Una de las pruebas de lo inusual que fue todo el último día es que el lugar por el que pasaron los migrantes desde Marruecos (una valla fronteriza junto al mar) al enclave español no suele ser usado para ingresar irregularmente, puesto que está fuertemente custodiado por la policía marroquí. No obstante, algunas organizaciones humanitarias afirmaron que se había corrido la voz entre los ciudadanos del país africano de que las fronteras con el país europeo estarían abiertas entre 48 y 72 horas. Ayer, la pasividad de las fuerzas fronterizas del lado marroquí era evidente: incluso abrieron las puertas para que pudieran pasar.

Fuente: (FaroTV Ceuta)

¿Por qué Marruecos abriría así la frontera?

Para entender lo que sucede entre ambos países es necesario retrotraerse 45 años y situarse en el Sahara Occidental, en el noroeste del continente africano. Allí, España tenía una colonia (la provincia 53), pero en 1967 las Naciones Unidas recomendaron su descolonización. Lo que sucedió fue que, en 1976, España directamente abandonó el territorio sin terminar de arreglar quién quedaría a cargo.

Contra todo protocolo de descolonización, de buenas a primeras abandonó a sus habitantes (que hasta entonces eran ciudadanos españoles) y los dejó a merced de Marruecos y Mauritania que querían este territorio para sí mismos. Mauritania, derrotada, luego se retiró, pero Marruecos ocupó gran parte del territorio. No obstante, dentro del mismo Sahara Occidental también se levantaron movimientos nacionalistas que reclaman su autodeterminación. El más importante de ellos y que controla una pequeña parte (la República Árabe Saharaui) es el Frente Polisario. Hace seis meses se rompió el alto el fuego entre ambas partes.

Al día de hoy, España es considerada por las Naciones Unidas como la potencia administradora del territorio no autónomo del Sahara Occidental, aunque sus esfuerzos por resolver el conflicto fueron muy pocos en las últimas décadas. En este contexto, las relaciones con Marruecos fueron siempre delicadas. Desde hace tres años, no obstante, las relaciones estaban bien aceitadas y Madrid, incluso, promovió un fondo europeo que específicamente está destinado para asistir a Rabat en el control de su inmigración. Hace tres semanas, sin embargo, hubo un punto de inflexión.

España accedió a tratar en su territorio al líder del Frente Polisario, Brahim Ghali, de 72 años, presuntamente porque está enfermo de coronavirus, aunque se especula con que, en realidad, padece cáncer. La noticia de que el líder de la República Saharaui está internado en un hospital del norte del país europeo cayó muy mal en el reino marroquí; tanto, que convocaron al embajador español para pedir explicaciones. El Gobierno español fue muy claro: se trata solo de una cuestión humanitaria y no una toma de posición. 

Fuente: (RTVE)

No obstante, pareciera que Marruecos no lo cree así y que la apertura de las fronteras en el enclave español es una medida de presión que parece funcionar. En las últimas horas, se conoció que el Gobierno de España aprobó dar 30 millones de dólares a Rabat para frenar la migración irregular. No obstante, el conflicto de fondo está lejos de terminarse.