Por puertas secretas: los talibanes guiaron a civiles estadounidenses hasta el aeropuerto de Kabul

Estados Unidos habría negociado un acuerdo secreto con los talibanes que permitió que estos escoltaran a grupos de estadounidenses hasta las puertas del aeropuerto de Kabul mientras intentaban escapar de Afganistán.

Según dos funcionarios de defensa, las fuerzas de operaciones especiales de la nación norteamericana instalaron junto a los fundamentalistas islámicos una “puerta secreta” en el aeropuerto y establecieron “centros de contacto” para guiar a los estadounidenses hacia la pista de evacuación.

Los funcionarios dijeron que se notificó previamente a los estadounidenses y se les pidió acudir a “puntos de reunión” preestablecidos cerca del aeropuerto, donde los talibanes verificaban sus credenciales y los trasladaban a una puerta tripulada por el ejército, lo que les permitía sortear a las grandes multitudes de afganos que buscan huir.

Las tropas estadounidenses pudieron ver a sus compatriotas acercarse con junto a escoltas talibanes en la mayoría de los casos en un intento por garantizar su seguridad física.

Los funcionarios hablaron con la cadena CNN bajo condición de anonimato debido a la sensibilidad de los arreglos, que no se han revelado hasta ahora porque Estados Unidos estaba preocupado por la reacción de los otros talibanes, así como por la amenaza de ataques de ISIS-K si sus operativos se hubieran revelado.

“Funcionó, funcionó maravillosamente”, dijo uno de los funcionarios sobre el arreglo. Hasta el lunes, cuando Estados Unidos completó su retirada, más de 122 mil personas lograron ser transportadas en avión desde el Aeropuerto Internacional Hamid Karzai.

Hubo otro arreglo secreto con los talibanes

Otro arreglo secreto separado que no se reveló hasta que terminó la operación, según dijeron los mismos funcionarios a CNN, fue el que desplegaron las tropas del Comando Conjunto de Operaciones Especiales de élite de Estados Unidos y otras unidades de operaciones especiales que también en tierra que facilitaron también la salida de ciudadanos estadounidenses a través de los denominados “centros de llamadas”.

Con una “puerta secreta” propia, las fuerzas de operaciones especiales norteamericanas establecían comunicaciones directas con sus compatriotas y les decían por dónde caminar para encontrar el acceso oculto al aeropuerto de Kabul.

El comandante del Comando Central de Estados Unidos, el general Frank McKenzie, reveló públicamente por primera vez la participación de las fuerzas de operaciones y aseguró que esas fuerzas ayudaron a evacuar a más de mil ciudadanos estadounidenses y más de dos afganos.