Bolsonaro apuntó contra Lula por impulsar el desarme de la población civil: “Es enemigo de Brasil”

El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, volvió a criticar, este miércoles, al exgobernante brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, por oponerse a la legalización del porte de armas de fuego en la nación e impulsar una política de desarme dentro de la población civil; dos de las premisas de campaña del actual mandatario.

Desde un acto gubernamental en el estado de Goiás, al centro oeste del país sudamericano, Bolsonaro arremetió contra Lula y lo llamó “enemigo de la patria” por plantar una postura contraria con respecto al porte de armas de fuego en Brasil. 

“Ustedes ya saben quién es el verdadero enemigo de Brasil; es ese que se viste de rojo y que usa una bandera con el martillo y la hoz. No utiliza los colores verde y amarillo de nuestro estandarte”, expresó el jefe de Estado, de Brasil, en alusión a la simbología de los partidos comunistas del mundo.

En la misma línea, aseguró que su política de flexibilización para el uso y porte legal de armas de fuego en el país “es sumamente necesaria” para garantizar la vida y la protección de la población. 

“Queremos legalizar el porte de armas de fuego para los ciudadanos de bien. Ustedes saben que las armas representan una garantía para la vida, sobre todo para las personas que viven en lugares distantes. El pueblo armado nunca podrá ser esclavizado”, afirmó el mandatario en un evento de entrega de terrenos a campesinos. 

Desde el año 2018, el presidente Jair Bolsonaro busca aprobar una normativa para legalizar el porte y uso de armas en la población civil del país, emulando la Segunda Enmienda a la Constitución de los Estados Unidos que protege el derecho de sus ciudadanos a poseer y portar armas de fuego. 

La campaña de descrédito de Bolsonaro

Desde que Lula da Silva mostró sus intenciones de volver a presentarse como candidato a la presidencia para las elecciones de octubre, el presidente Jair Bolsonaro ha emprendido una feroz campaña de descrédito contra el líder del Partido de Trabajadores de Brasil, a quien ha tildado de “ladrón” y “corrupto” por su implicación en el caso Odebrecht. 

Recordemos que el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva pasó 580 días en prisión por su presunta vinculación a un caso de corrupción en el país, acusación de la cual fue absuelto el año pasado por orden del Supremo Tribunal de Brasil.