ESTADOS UNIDOS
Contradice su discurso: el perturbador hallazgo en la casa de una activista antiaborto
Las autoridades revisaron su vivienda tras una denuncia por la existencia de materiales de riesgo biológico.Lauren Handy tiene 28 años, es directora de la ONG antiaborto de Washington, Estados Unidos, y es conocida por sus radicales posturas en contra de la irrupción voluntaria del embarazo. Este fin de semana una perturbadora alerta llevó a las autoridades a revisar su casa.
La Policía de Washington inició una investigación por la posible presencia de material de riesgo biológico en la vivienda de la activista antiaborto. Tras revisar el lugar, confirmaron el hallazgo de al menos cinco fetos humanos, lo que puso en cuestión su discurso contra la interrupción del embarazo.
Ante el descubrimiento, Handy habló con un medio local, con el que reiteró su postura antiaborto, y aseguró que sabía sobre la investigación y esperaba que se llevara a cabo. Aunque no dio mayores detalles, dijo que encontraron refrigeradores portátiles con los restos, aunque se negó a mencionar los fetos, porque “la gente se asustaría al escucharlo”.
El jefe de la policía local, Ashan M. Benect, dijo que los restos humanos eran de fetos que fueron abortados, lo que elimina cualquier problema legal. Pese a esto, la pregunta de las autoridades es cómo llegaron estos restos y por qué permanecían en la casa de la activista antiaborto.
Para qué utilizarían los fetos
De acuerdo a la directora de la organización provida, ella planeaba una actividad en la que se referiría a los niños fallecidos en una conferencia de prensa que se realizaría esta semana. Esto fue anunciado a través de Facebook a todos sus seguidores.
El comportamiento de Lauren Handy también fue cuestionado en octubre de 2020, cuando fue acusada de conspirar contra los derechos humanos de las mujeres al bloquear el ingreso a una clínica de abortos ubicada en Washington.
Por ese hecho, hace solo unos días fue acusada de conspiración, junto a otras ocho personas. Los cargos contra Handy incluyen la transgresión a la Ley de Libertad de Acceso a las Entradas de las Clínicas, conocida como la Ley Face, en Estados Unidos.
Si es declarada culpable por conspiración podría ser condenada hasta a 11 años en prisión y tendrá que pagar una multa que asciende a 350 mil dólares. En 2015 también fue acusada de allanamiento de morada, así que tiene un amplio prontuario judicial.