La razón por la que Carmen Barbieri fue reemplazada en su programa

Carmen Barbieri es una de las personalidades más destacadas en los medios y, a lo largo de su carrera, se comprometió firmemente con su agenda diaria. Es por esto que, a esta altura de la vida, llama la atención muy a menudo por sus ausencias televisivas.

Es que Carmen Barbieri falta cada vez más seguido a su programa de televisión. De hecho, en la jornada de hoy, volvió a estar en falta. Sin embargo y afortunadamente, la conductora de “Mañanísima” cuenta con la ayuda y la confianza de sus panelistas, Estefi Berardi y Pampito.

Es por eso que ellos son quienes suelen reemplazar a Carmen Barbieri cada vez que la conductora oficial del ciclo de entretenimiento no está en el aire. Hoy, Pampito abrió el espacio y le envió saludos, mientras explicaba a la audiencia por qué no estaba la estrella máxima.

“Hoy no está Carmen, le mandamos un beso. Se está recuperando, sentía un poco de ‘chucho’”, mientras que Estefi Berardi sumó: “Una gripecita”. Y Pampito continuó: “Una gripecita, así que estamos acá haciendo el aguante y le mandamos un beso a Carmen, que la queremos, la extrañamos”.

Además el destacado periodista de Artear comentó, para darle un espaldarazo a su compañera: “Este es su programa y se lo vamos a cuidar, seguramente mañana ya estará con nosotros”.

Carmen Barbieri, las ausencias del 2022

Cabe destacar que este año, Carmen Barbieri se ausentó numerosas veces por indicaciones médicas o extralaborales al programa de Ciudad Magazine. En un primer momento, en febrero, lo hizo con permisos especiales de la producción por cansancio intenso por sus presentaciones teatrales en el verano.

Luego, volvió a dejar el ciclo en manos de sus panelistas para acompañar a Federico Bal, que se había accidentado cuando estaba en Brasil y debió ser intervenido quirúrgicamente. En ese momento, participó con algunos móviles.

Luego de eso, una serie de peripecias afectaron a la actriz teatral, por lo cual fue muy común ver el desempeño de Pampito como conductor y hasta el de Estefi, que, una vez y sin miedo, salió sola en el aire. ¡Licencias de una diva!