Con 3 trucos infalibles, hacé que florezcan tus suculentas y se llenen de colores

Los fanáticos de las suculentas se suman rápidamente, más ahora que es la época en la que la mayoría de ellas crece repentinamente y hasta florecen. De esa forma, se lucen al cien por ciento y logran conquistar aún más a los aficionados.

Pero, ¿sabés cómo ayudar a que tus plantas suculentas lleguen exitosamente a este momento del año? En esta nota, repasamos tres cuidados infalibles que tenés que priorizar para la floración de las crasas.

Pero, antes de seguir, tenés que saber que si bien en primavera y verano podés ver a las suculentas regordetas y coloridas por sus flores, algunas variedades de echeverias o graptopetalum florecen entre el otoño y el invierno. Ahora sí, no te decepcionarás.

Luminosidad

En sus hojas, las suculentas no solo almacenan agua, sino también las propiedades que absorben del sol. Estas bellas plantas necesitan la mayor iluminación posible para que puedan florecer.

Sin embargo, eso no quiere decir que la dejes bajo el sol todo el día, podría quemarse. Lo mejor que podés hacer por ella es colocarla en un espacio donde haya mucho sol, pero no directo en las horas del mediodía, para que pueda producir lo necesario en la floración.

Fertilizante 

Todas las plantas necesitan este impulso para crecer favorablemente, hay de muchas variedades en el mercado y hasta podés hacerlo vos mismo. Recordá que un fertilizante rico en fósforo durante los meses de crecimiento activo (primavera y verano) dará buenos resultados.

Eso sí, es necesario que evites fertilizar las suculentas más de una vez al mes, podrías arruinarlas y hasta causar su muerte. Para asegurarte de dar algo más saludable, podés crear tu fertilizante a partir de restos orgánicos, como cáscaras de banana y huevos.

Riego

Es más que obvio que las suculentas, como cualquier planta natural, precisa agua para su crecimiento y como aprendimos, no es necesaria tanta. Regarlas en la justa medida hará que estas plantas carnosas florezcan magníficamente.

Lo más recomendable es regar las crasas solo cuando notes que el sustrato está completamente seco y durante la temporada invernal reduzcas el riego para evitar que tu planta se pudra.