Encontraron el barco en el viajaban el periodista e indigenista asesinados en la Amazonia

Las autoridades de Brasil encontraron la embarcación en la que viajaban Dom Phillips y Bruno Pereira, quienes fueron asesinados mientras realizaban un recorrido por la Amazonia para estudiar a las comunidades originarias.

La nave fue encontrada a unos 20 metros de la orilla del río Itacoaí, en la selva, y se someterá a diferentes estudios forenses en los próximos días. La Policía Federal confirmó que los hombres fueron asesinados en la región del Valle de Yavarí, según confesaron los detenidos, que residen en la Amazonia.

Las autoridades confirmaron que el motor y el amarre fueron atados a la embarcación junto con cuatro tambores, con el objetivo de hundirla. “Las investigaciones continúan para esclarecer todas las circunstancias, los motivos y las personas implicadas en el caso”, explicó la Policía Federal que lleva varias semanas de investigación en la Amazonia.

El área donde fueron encontrados los cuerpos es conocida por ser una de las más inaccesibles de esta región y donde hay mayor concentración de pueblos indígenas que tienen nulo contacto con la civilización. Esta zona, también es conocida porque es utilizada por las organizaciones criminales para el tráfico de estupefacientes que llegan desde Perú y serán trasladadas a Europa.

Por esta región, también circulan varias materias primas que son extraídas de forma irregular. La confesión de Amarildo de Costa Oliveira, alias “Pelado”, reveló a las autoridades dónde enterró a los desaparecidos y cómo escondió el barco en el que viajaban.

Los detenidos eran pescadores

La Policía Federal aseguró que Costa Oliveira y su hermano son pescadores de la zona y confesaron el crimen tras una discusión en la que reconocieron la pesca ilegal. Un testigo clave aseguró que vio a Oliveira cargar la escopeta y elaborar un cinturón de municiones, poco tiempo después de que Phillips y Pereira salieran de la comunidad de la Amazonia en la que trabajaron.

Oliveira tiene graves antecedentes por amenazar y arremeter contra los pueblos indígenas de la zona y fue sospechoso de la desaparición de los dos hombres desde el 5 de junio, cuando fueron vistos por última vez.