Nueva York pondrá en marcha su ley contra la portación de armas el 1 de septiembre

La gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, anunció que la nueva ley que restringe el uso de armas de fuego en espacios públicos entrará en vigencia el 1 de septiembre. La normativa restringe el uso de estos dispositivos en espacios turísticos como el Times Square.

La legislatura del estado aprobó la normativa el viernes como una respuesta a la decisión de la Corte Suprema de Estados Unidos, que la semana pasada avaló que se puedan llevar armas de fuego en público a nivel nacional. Pero esta no es la única decisión elevada al pleno de Nueva York.

Los diputados también votaron a favor de que se elevara el derecho al aborto en la Constitución de Nueva York; sin embargo, la medida tiene que someterse al referéndum en dos ocasiones, lo que coincide con las próximas citas legislativas, la más próxima será en noviembre.

Esta jugada en la legislatura también se convierte en una respuesta a la decisión del Tribunal Supremo, que derogó el derecho al aborto que estuvo vigente por casi 50 años en el territorio estadounidense. La decisión fue ampliamente criticada por diferentes organismos internacionales en pro de los Derechos Humanos.

La restricción del uso de armas en espacios públicos en esta jurisdicción incluye especialmente los espacios donde se reúnen los niños, el metro, los establecimientos de salud, colegios, universidades, estadios, parques y teatros.

Nuevas condiciones para obtener los permisos

Quedan incluidos en las restricciones para portar armas los zoológicos, hogares de ancianos, casas de culto, albergues para víctimas de violencia doméstica, espacios privados como restaurantes, bares y residencias, a menos que el propietario permita el uso de los dispositivos y lo indique en un letrero visible para sus visitantes.

Obtener armas en Nueva York tendrá limitantes, quienes deseen comprar una tendrán que capacitarse por al menos 16 horas y deben cumplir con dos horas de entrenamiento en un campo de tiro. Además, estos dispositivos no podrán almacenarse en hogares y vehículos ya que la pena de prisión podría ser de hasta cuatro años.