REINO UNIDO
Cortes programados: el Reino Unido se prepara para un invierno con déficit de energía
La factura anual del servicio subirá drásticamente según las autoridades británicas.
El Reino Unido ya se prepara para el invierno, que según los pronósticos será uno de los más intensos de los últimos años, con temperaturas por debajo del promedio y en medio de la escasez de gas profundizada por el conflicto entre Rusia y Ucrania.
Al igual que otros países europeos, el Reino Unido trabaja un plan que ayude a palear la crisis energética y no descarta cortes programados del suministro. La agencia Bloomber destacó que existen varios escenarios posibles para el territorio británico, bajo una situación pesimista sobre sus capacidades energéticas.
De acuerdo a los analistas, el Reino Unido solo alcanzará a cubrir la sexta parte de su demanda, lo que llevará a la reactivación de varias plantas de carbón. Todo esto ocurre debido a la reducción de las importaciones que llegan desde Noruega y Francia, países duramente afectados por la guerra iniciada por Vladímir Putin.
La nación liderada por Boris Johnson tendrá que activar todas sus medidas de emergencia en enero por un déficit de cuatro días, que obligará a imponer un racionamiento y cortes programados.
El Reino Unido no tiene gran capacidad de almacenamiento y ha enviado sus excedentes a otras naciones de las que espera una devolución en sus peores momentos. El invierno será especialmente frío y eso hará que se dependa considerablemente de la solidaridad internacional.
Las previsiones en la factura
De acuerdo al gobierno del país europeo, a partir de enero, las boletas del servicio podrían sobrepasar los 5.100 dólares anuales. La consultora Cornwall Insight presentó un informe con el que le exigió al Ejecutivo más acciones para aliviar el incremento.
Al calculo deben sumarse unos 700 dólares por la emisión de facturas trimestrales. Una familia que paga actualmente el equivalente a 200 dólares llegará a pagar 400 a principios del año que viene.
