Preocupación en la isla de La Palma: la temperatura del volcán Cumbre Vieja superó los 1.000 grados

A casi ocho meses de haber culminado la erupción en el volcán Cumbre Vieja de La Palma, en Canarias, los equipos científicos de la isla han detectado nuevos puntos de calor en la superficie del coloso, con los registros más altos desde el fin de la actividad sísmica y volcánica.

De acuerdo con los datos divulgados por el Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan), las temperaturas en el monte Cumbre Vieja de La Palma han superado hasta los 1.000 grados Celsius en los últimos días, especialmente en la zona sur del coloso, donde se encuentra la colada Tajogaite. Este cráter, ubicado al este del archipiélago español, fue el último en detener su actividad sísmica en diciembre pasado. 

“Expertos del Instituto Geográfico Nacional (IGN) e Instituto Geológico y Minero de España (IGME) han encontrado varios puntos incandescentes en el cráter del coloso, donde las temperaturas han alcanzado hasta los 1.002 grados Celsius”, indicó en Twitter Involcan al compartir un video de las mediciones. 

Las imágenes muestran varios agujeros en el suelo con ríos de lava incandescente corriendo bajo la superficie terrestre, pero a una profundidad muy escasa. Los emplazamientos se encuentran muy cerca de la colada Tajogaite, una de las cinco que se abrieron durante la erupción en la isla de La Palma de 2021. 

El pasado miércoles (3 de agosto), Involcan colgó en su cuenta de Twitter otro video donde se observa a varios de sus expertos en vulcanología midiendo con una sonda la temperatura subterránea del volcán, la cual se ubicó a unos 806 grados Celsius. 

Además, se postearon varias imágenes en las que se ve cómo se encuentran los depósitos de azufre y otros materiales volcánicos solidificados tras la erupción de la isla, que finalizó en diciembre de 2021. 

Riesgo de una nueva erupción 

Desde hace varios meses, las autoridades del organismo científico advierten a la población de La Palma sobre la posibilidad de una nueva erupción volcánica en el monte Cumbre Vieja, debido a las altas temperaturas que se registran en el terreno y la persistente emisión de gases tóxicos. Sin embargo, sostienen que “la actividad sísmica en la zona se mantiene bajo parámetros normales”.  

El pasado 19 de septiembre de 2021, el volcán Cumbre Vieja entró en fase eruptiva de forma repentina en la que fue considerada como “la más larga en toda su historia, con 84 días de duración”. En casi tres meses, el coloso arrasó con más de 1.600 edificaciones, cerca de 2.000 hectáreas de vegetación y dejó pérdidas económicas que superan los 1.000 millones de euros, según datos del Gobierno de Canarias.