4 vitaminas que aceleran el metabolismo y ayudan a adelgazar

En la actualidad, cada vez son más las personas que recurren a suplementos nutricionales para darle al cuerpo las vitaminas y minerales, además de la fibra y la proteína, que el cuerpo realmente necesita. Esto sucede porque los alimentos ya no vienen como hace 20 o 30 años, los cuales eran mucho más naturales.

Hoy en día, los alimentos que obtenemos en un supermercado o despensa no contienen la misma cantidad de nutrientes y eso hace que nuestro organismo tenga deficiencias. Las vitaminas son fundamentales para que los órganos funcionen de forma correcta y es por eso que te dejaré algunos ejemplos así los incorporas en tu dieta. 

Creas o no, el organismo al no recibir los mismos nutrientes que en la era de nuestros abuelos comienza a tener algunas dificultades: resfrios más seguidos, molestias articulares o musculares, más sueño y fatiga, entre otras. Al consumir vitaminas, mejor si eliges las naturales, tu organismo será otro y notarás los cambios. 

Aquí te dejo 4 opciones que puedes incorporar en tu rutina diaria y así elevarás tu energía y bienestar. 

Vitamina B:

Estas son esenciales para tener un correcto metabolismo y ayudarán justamente a metabolizar los carbohidratos, grasas, proteínas, entre otras. Los huevos, las lentejas, la carne magra o los cereales integrales, son algunos ejemplos. 

Vitamina D:

Es necesaria esta vitamina para tener un sistema inmunológico saludable. El cuerpo si puede obtenerla a través del sol, pero también puedes recurrir a otros alimentos. Esta ayuda a prevenir la depresión. Las sardinas, el atún y los lácteos son algunos ejemplos. 

Vitamina C:

Más conocida como ácido ascórbico, es un nutriente hidrosoluble y se encuentra en algunos alimentos. En el cuerpo actúa como antioxidante. Ejemplo: naranjas, pimientos rojos y kiwi. 

Vitamina E:

Es un nutriente liposoluble y está en varios alimentos. Esta vitamina también actúa como antioxidante y ayuda a proteger las células contra los daños causados por los radicales libres. Ejemplos: espinaca, brócoli, frutos secos.